generación z clave en la transformación digital

Generación Z, clave en la transformación digital

Vivimos en una sociedad en continuo cambio debido a los avances tecnológicos, por lo que las compañías deben de estar a la altura y anticiparse a cualquier novedad. Por ejemplo, anticiparse a los rasgos del perfil de empleado de las nuevas generaciones que se irán incorporando en la plantilla, ya que serán la clave en la transformación digital. Los “millenials” o nacidos a partir de la década de los 80 serán quienes sirvan como referente a la siguiente generación.

Los «centenials» o generación Z son todas aquellas personas nacidas en los últimos años de los 90 o al inicio de los 2000. Es decir, tienen ahora poco más de 20 años y se están incorporando a las empresas. Vamos a ver cuáles son sus características y qué podemos hacer para facilitar su incorporación a los equipos intergeneracionales. Lo que tenemos claro es que son una pieza clave en la transformación digital.

 

Rasgos característicos de la Generación Z

  1. La principal característica que debemos tener en cuenta es que esta generación es la primera 100% digital, hiperconectados y capaces de trabajar con varias pantallas a la vez.
  2. Están muy sensibilizados con los graves problemas medioambientales que han provocado y provocan generaciones anteriores que, durante décadas, han desoído las alertas que el planeta enviaba.
  3. Son autodidactas, consideran que la fuente de todo conocimiento está en Internet y que pueden acceder a cualquier dato o tutorial en un par de clics.
  4. Son muy conscientes de que muchas tareas humanas se pueden automatizar y esto influye en la importancia que le dan al talento y la creatividad, que aún no se pueden programar. Este dato sin duda los convierte en una pieza clave en la transformación digital.
  5. Están muy concienciados con la importancia del tipo de datos que comparten online. Empezaron a utilizar dispositivos móviles antes de hablar y conocen todas las implicaciones que un mal uso puede derivar.
  6. Son menos idealistas que sus predecesores, a quienes se les aseguraba que estudiar una carrera y un máster les proporcionaría un buen empleo.

 

Particularidades de las plantillas intergeneracionales

Según el informe 2017 Graduate Emmployment Study, el 82% de los «centenials» prefiere dar sus primeros pasos profesionales en una pyme para ganar experiencia y después pasar a una gran empresa. Durante años hemos visto que esto era al revés. Las grandes multinacionales absorbían mano de obra recién titulada para aprovechar sus ideas frescas y el hecho de no tener manías adquiridas. Una vez ganaban experiencia, o bien ocupaban puestos de mayor rango en la misma compañía, o bien pasaban a otras empresas que valorasen el bagaje conseguido en sus primeros empleos.

Si miramos desde otra perspectiva, uno de los principales retos a los que se han tenido que enfrentar los empleados de las generaciones anteriores ha sido, precisamente, ponerse al día en cuestiones digitales. En muchas plantillas todavía podemos encontrar empleados con problemas para manejar programas sencillos de ofimática. Este problema se acentúa cuando nuevos empleados más familiarizados con entornos automatizados entran a formar parte de los mismos departamentos. Los más veteranos pueden sentir inestabilidad y temor ante la posibilidad de dejar de resultar útiles. Las compañías han de prevenir estas situaciones poniendo en valor el trabajo individual y facilitando programas eficaces de formación actualizada y útil.

 

Consejos para facilitar la incorporación de los jóvenes empleados

  1. En primer lugar, es importante no perder de vista la gran capacidad de adaptación que tiene la Generación Z. Por este motivo, necesitan obtener aprendizaje continuo, retos profesionales y la posibilidad de acceder a cambios en sus puestos que puedan reportarles oportunidades de evolución en su carrera profesional.
  2. Por otro lado, las férreas estructuras piramidales imperantes en el sistema capitalista no sirven como modelo a las nuevas generaciones. Buscan la complicidad de un líder en lugar de la jerarquía de una sola persona que les imponga sus formas de trabajar.
  3. Algo obvio es que las compañías deben aprovechar las habilidades digitales de estos nuevos empleados. Sin olvidar que deben ayudar a que los más veteranos no se queden fuera, ya que también son un elemento clave en la transformación digital.
  4. La flexibilidad y creatividad deben ser pilares básicos sobre los que construir los equipos. Algunas de las principales habilidades de los empleados más jóvenes son la colaboración y la comunicación. El entorno de trabajo digital facilita la flexibilidad y la conciliación, dos de los asuntos por los que más han luchado en el entorno laboral las generaciones anteriores.

 

En conclusión, resulta imprescindible conocer bien las características de las diferentes generaciones que conviven en una compañía. Esto incentiva sus fortalezas y minimiza las diferencias que puedan causar conflicto. Trabajar juntos servirá para abordar la era digital con todas las habilidades de los más jóvenes y la experiencia de los más veteranos.

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