Si conoces la relación entre tecnología y la productividad en un negocio, serás consciente de que su introducción es una de las opciones más adecuadas para conseguir aumentar el rendimiento final de las acciones de tu organización. Pero, ¿conoces las claves para aumentar la productividad?
Tecnología y productividad para mejorar tu negocio
La productividad de un negocio es el resultado de relacionar el valor que genera con los recursos usados para lograrlo. Por supuesto, siempre se busca maximizarlo a través de optimizar las opciones a disposición de la empresa. ¿Cómo puedes aplicar la tecnología a tu negocio y hacerlo más productivo?
La verdad es que en los últimos años se han ido incorporando diversas soluciones que te ayudarán a ofrecer el mejor servicio a tus clientes. Desde dispositivos con una funcionalidad específica a la aplicación de inteligencia artificial para procesos como la asignación de tareas en diversos sectores. Esencialmente, podemos decir que te permiten ejecutar algunas tareas en el mínimo tiempo posible, gracias a algunas de sus funcionalidades. De esta manera, también consiguen eliminar o sustituir algunos de los procesos más habituales que se realizan de forma manual.
En definitiva, cuando hablamos de la mejora de la productividad en las empresas gracias a la introducción de la tecnología nos referimos a la posibilidad de generar un valor diferencial positivo para los clientes. Esto se traduce generalmente en un ahorro económico, de tiempo y de recursos humanos. Por lo tanto, la tecnología en las empresas consigue un efecto transformador del negocio que lo hace crecer y le permite desarrollar otros modelos. Fruto de todos estos cambios, la empresa consigue mejorar su productividad.
Aumento de la motivación de los empleados
Contar con trabajadores satisfechos en el equipo es indispensable para asegurar su motivación y, a largo plazo, su productividad. Si una persona está comprometida con su empresa y su lugar de trabajo, lo más habitual es que rinda a un nivel superior. Introducir la tecnología en una empresa representa también una ayuda para el equipo humano. Y, obviamente, esto es valorado muy positivamente; hasta el punto de que mejora el vínculo de los empleados con el negocio y sus resultados.
Asimismo, la implantación de nuevas tecnologías también resulta crucial para mejorar las dinámicas laborales y lograr que los empleados vean que tienen ante sí un proyecto a medio y largo plazo para ellos. En consecuencia, se aumenta su confianza y sus ganas de trabajar mejor y producir más. Un buen ejemplo de esto son las smart offices: los entornos de trabajo inteligentes ofrecen soluciones completas que permiten reducir el estrés de los trabajadores y crear un ambiente laboral más cómodo y motivador para la plantilla.
Finalmente, hay que tener en cuenta que la tecnología también permite algo tan importante como el teletrabajo. La flexibilidad que implica supone una gran ayuda para la conciliación laboral y familiar, un factor esencial para incrementar la motivación de los empleados para ser productivos.
Disminución de los errores humanos
Uno de los efectos positivos de la introducción de la tecnología en las empresas es que representa la automatización de procesos repetitivos, que hasta ahora llevaban a cabo los empleados. Dejar estas tareas en manos de dispositivos tecnológicos representa la garantía de eliminar los errores humanos fruto de la repetición continua de una misma tarea durante horas. Evitar esto permite mejorar la productividad final.
Reducción de los tiempos de ejecución de los procesos
El tiempo invertido en la ejecución de determinados procesos de producción de una empresa es uno de los factores que puede influir de manera negativa en su productividad. Y es que la mano de los empleados no puede competir en rapidez con la actividad de los medios que cuentan con las tecnologías más avanzadas, capaces de llevar a cabo una actividad en la mitad de tiempo. Esto representa un lastre importante para aquellos negocios que requieren de una serie de procesos intermedios básicos para el producto final.
No podemos olvidar que el tiempo es dinero para cualquier negocio. Una inversión inicial en tecnología para poder ejecutar diversos procesos industriales de manera más rápida y con la misma calidad de siempre tiene un ROI muy alto, ya que aumenta la productividad final en muchos casos más allá del 50 %.
La incorporación de nuevas funcionalidades es clave para aumentar la productividad
Las soluciones tecnológicas más modernas permiten que una empresa pueda incorporar funcionalidades que hasta ahora no podía ni plantearse asumir. Así, por ejemplo, la realidad aumentada posibilita que los mecánicos reciban en unas gafas especiales esquemas y boletines técnicos, con cuyo soporte pueden reducir el tiempo de ejecución de las reparaciones en un 40 %.
Vincular la tecnología y la productividad te da la posibilidad de contar con recursos que mejoren los resultados de la empresa, reduciendo tiempos y tareas repetitivas y, a la vez, haciendo que los empleados se sientan satisfechos. ¿Quieres saber cómo pueden ayudarte los avances tecnológicos a incrementar la productividad de tu empresa? Contacta con nosotros y te daremos toda la información que necesites.